Buenos días, chicas! Hoy nos hemos levantado muy golosas. Para qué engañarnos, ¡nos encanta el dulce! Y sabemos que a vosotras también.
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El día de nuestra boda tenemos que dejar sitio para el postre, y casi siempre optamos por ese gran pastel de varias plantas. Pero, ¿sabías qué hay miles de tipo de pasteles? Con miles de colores, formas, temas, estilos, sabores.
En nuestra entrada de hoy os proponemos varias propuestas. Si fuese por nosotras, nos quedaríamos con todos los pasteles habidos y por haber, por qué son todos monísimos. ¡Pero hay que guardar la línea!
Desde Versalles a tú boda
Un fantástico pastel con una ornamenta muy barroca, muy rococó. Colores muy suaves, lazos que ribetean alrededor, miles de rosas apuntalan cada centímetro de pastel. Una tarta que te hace viajar al reinado de Maria Antonietta, a la Francia más barroca, a los tiempos de oro del palacio de Versalles, dónde reina el glamour y la exquisitez.
¡Qué viva el chocolate!
¿Quién no ha soñado alguna vez con un pastel a rebosar de todo tipo de chocolate? Ese sueño se puede hacer realidad. En esta tarta se fusionan el chocolate negro, blanco y con leche para poner a prueba nuestro paladar. Estamos seguras de que será una de las mejores tartas que hallamos probado. Para los amantes del chocolate éste pastel será el súmmum.
Shine bright like a diamond
¿Si el día de vuestra boda brilláis cómo diamantes, porqué no iba a brillar vuestra tarta nupcial? Un pastel al nivel de Swarozky.
Una tarta muy floral
Las flores siempre han sido sinónimo de adorno. Las flores suelen pegar con todo, y en una tarta nupcial no iba ser menos. Una puesta segura en cuánto elegancia y buen gusto.
Una apuesta muy pintoresca
Si Van Gogh o Leonardo Da Vinci, incluso Gustave Eiffel, levantaran la cabeza, estaríamos seguras que morían de amor al ver tartas nupciales cómo estas. Arquitectura, pintura, diseño y color, se unen para crear un pastel de lo más original.
¡Cómo pasa el tiempo!
Existen amores de toda la vida, qué llevan años demostrando que se puede encontrar el amor verdadero. Amores que se conocen desde niños, pasan juntos la adolescencia, la juventud, y por fin deciden dar el gran paso; casarse.
No hay mejor idea que reflejar ese paso del tiempo en modo viñeta en una tarta nupcial. Una apuesta de lo más bonita, y de lo más sentimental.
Hasta aquí nuestras propuestas de hoy. Esperamos que os haya gustado, y recordar que nuestra vida es más feliz siempre que haya un poco de dulce.
